La Quiromancia es el arte de la adivinación a través de la lectura de los rasgos, formas y signos que cada mano presenta como identificativos y únicos e cada persona.
 
La lectura de las manos se basa en que todos los trastornos del carácter espiritual repercuten en el campo orgánico y viceversa. Así, la forma de las manos manifiesta el carácter de su poseedor.
 
Si bien, la mano conserva durante la vida algunos rasgos generales, hay otros rasgos que van variando en el tiempo.
 
Para leer las manos, debemos fijarnos en varias cosas:
 
El modo en que el sujeto ofrece su mano para la lectura: si la persona abre completamente la mano separando los dedos entre sí, estamos ante una persona enérgica, que da importancia a los bienes materiales. Por el contrario, quien separa el índice de los demás dedos, tiene tendencia a proteger a los débiles. Alguien que junta los dedos y forma una especie de cuenco, será una persona interesada. Si junta todos los dedos menos el pulgar, será una persona positiva y práctica.
La forma de las manos.
La forma de los dedos.
Las uñas.
Las líneas de las manos.